Un día del niño sin marketing
Hoy se conmemora el Día del Niño en Paraguay. No es una celebración
festiva. Recuerda la Batalla de Acosta Ñu o De los Niños, la última de
las grandes batallas de la Guerra de la Triple Alianza que se desarrolló
entre 1864 y 1870, y uno de
los
episodios más crueles y sangrientos de aquel conflicto. Entonces se
habían unido los Ejércitos nacionales de la Argentina de Mitre, del
Brasil del emperador Pedro II y del Uruguay del dictador colorado
Venancio Flores para arrasar al Paraguay, el primer país de Sudamérica
que tuvo hornos de fundición, como el de Ybicuí, ferrocarriles,
hospitales modernos para la época y el mayor ingreso por cápita de la
región, donde no había mendigos en las calles y que se autoabastecía sin
necesidad de importar del Viejo Continente. Los tres aliados cumplían
el mandato de Gran Bretaña, interesada en el algodón paraguayo y ansiosa
por colocar sus productos en un mercado cerrado a sus exportaciones.
Paraguay era un “mal ejemplo” para el continente.
Los dos
mayores ejércitos del sur americano, más las tropas de Uruguay, con el
respaldo de la mayor potencia económica y colonial de la época tardaron
seis años en abatir la valiente resistencia del pueblo paraguayo. Para
ello prácticamente exterminaron a toda su población masculina.